Teníamos un mantel blanco, inmaculado por la lejía, del que todavía podíamos oler el calor de aquella vieja pancha de carbón. Las tazas de los niños eran de cristal color caramelo, luego, con los años, supe que eran de duralex. Irrompibles. Las tazas de los mayores parecían cuadros redondos, con sus dibujos y filigranas, todos iguales, todos diferentes.
Alrededor de la mesa, 12 sillas. Los niños, sentados sobre nuestras rodillas. En aquellos años, la espalda no sufría. Los mayores bien sentados, rectos los hombros, seria la mirada.
Mi madre servía chocolate con sus rojas manos, frías y desgastadas. Entonces no sabía del sufrimientos de esas manos. Desde la calle nos llegaba el ruido de muebles, camiones y gritos.
Yo no quería chocolate, pero nada dije y me dejé servir. Al poco, todos dormían alrededor de la blanca mesa... todos menos yo.
Cuadro de Marco Osorno Marín.
38 comentarios:
Me sorprendiste con tu relato. ¡saludos Marina!
LAO. Gracias. Un abrazo para tí.
Pues, no... no me pude ir, que se espere la gripe un poquito:-)
Ya comprendo, esto es como la peli de los otros ¿verdad? todos los que estaban, ya no están.. o sea que están, pero ya se han ido... vaya, que no eran de duralex y por tanto tuvieron que ser prescincibles ¿es eso verdad? jajaja si es que en medio de mi mente aun me debe quedar una neurona sin mocos :-)
Montones de besos inmeeenos preciosa.
PD
Tú n no te vayas por favor, no eres de duralex pero eres imprescindible, al menos para mi
PD2
Desde la Cale-SA nos llegaba un ruido de cascabeles que resonaba en toda la calLe:-)
Muaaaaakss!! ciao cielo.
Wow!! espectacular.
Qué final para estremecedor. Muy bueno.
Un abrazo
Siempre que vengo sé me sorprenderás por tus excelentes relatos
Besos mi niña
Una especie de última cena? Algo tendría ese chocolate, habrás hecho bien en no beberlo?.
Besos con dulzura MB. TG <3
relato corto y sorprendente Marina!!!me gustó. Un beso
Todos iguales, todos diferentes. En la variedad está el gusto.
Un relato con destellos de recuerdos, me deja la sensación de haber presenciado una película en blanco y negro.
Gracias, Marina.
Besos
No hay mejor recuerdo como el que se ve a través de ese cristal ...descubrir el duralEX es fascinante, me ha encantado.
Un beso ...
Lindo y profundo tu relato Marina!
Reflexiones que nos vienen desde lo màs profundo del corazòn!,
mostràndonos nuestra fragilidad
y la entrañable suceptibilidad
de nuestra alma.
Buenos recuerdos que nos
traen un calor genuino...
aquello que està cercano
a nuestro ser.
Un fuerte abrazo
con todo cariño!
Me alegré y odié el 'duralex' sobre todo el de color caramelo.
Nos regalas un relato exquisito.
Un gran abrazo Marineta
Interesante tu relato Marina,yo tambien recuerdo esas tazas de duralex,un placer pasar por tu espacio,besitos
Los recuerdo siempre siempre están para que no olvidemos tiempos pasados llenos de amor y cordialidad.
El duralex es indestructible como tu´lo serás para que estés ahí y alguna paliza verbal te podamos dar.
Saludos
¿Y tú por qué no dormías? Debo de ser muy prosaica y me parece que estás contando la resonancia interior de una mudanza que en su día te dolió. Esa manía de querer interpretar lo que escribes...
Un beso, Marinilla.
…Mientras la Señora Encarnación, sonreía sentada en una pequeña silla de anea cosiendo con su sencilla maquina que imprimía sus movimientos con la mano derecha impulsando una rueda acoplada a la maquinilla de coser y con la otra sujetaba la tela que cosía...
un abrazo
antonio
Que hermosos recuerdos para los que seguimos vivos...
Todos menos tú, clara. Tú eras y eres especial...
Me encanto eso que dices de oler el calor de la vieja plancha de carbón.
· 9B9
· CR · & · LMA ·
Tengo una de aquellas viejas planchas de carbón con chimenea con un "Vulcano" barbudo en la salida del cenicero.
Me ha encantado tu relato, muy evocador. Me ha gustado esto de: Las tazas de los mayores parecían cuadros redondos, con sus dibujos y filigranas, todos iguales, todos diferentes. ¿Cerámica de la Cartuja Sevillana? ¿las negras o las rojas?...era la loza que los críos no podíamos tocar. Me ha gustado, sí Señora, me ha gustado y mucho.
¡Carajo, no había visto bien la foto...exactamente igual es la plancha que tengo!
MARÍA. Esa gripe tuya…la cuidas demasiado, no le hagas ni caso y terminará por irse… eso sí, cuando a ella le dé la gana je je je.
Yo no me voy, enanita mía, porque ese día no tomé chocolate… los demás murieron alrededor de una mesa de blanco mantel… es que me voy a pasar a la novela negro oscuro, como John A.
Besos antigripales.
EL DRAC. Gracias corazón, eso me anima.
Un besote.
AME. Bueno, ya sé que contigo tengo enchufe. No sé si es excelente…. Pero es negro negro color chocolate negro jejejeje.
Un besito feucha.
DULCE. Eso es, so listo, una especie de última cena..pero con chocolate.
BTB
WINNI0. Me alegro haberte sorprendido. Gracias
Besos
PACO. Mi queridísimo amigo, aquí seguimos escribiendo lo que me deja la cabeza.
Un besito
Myr. Pues si así lo has sentido, yo superencantada…me gusta eso que dices del blanco y negro.
Besos cielo.
TOMAE. Ya iremos descubriendo tú y yo, yo con mi Ex, tú con tu Ex¬-a más cositas
;)
FRANCISCO. Recuerdos dolorosos tb, de un pasado no tan pasado. No perdamos la memoria, amigo mío, es lo único real que nos queda.
Un abrazo gordote.
MARYLIN. ¡¡QUÉ BONITO!! No sabes cuánto me gustan a mi estas cosas.
GRACIASSSSSS Un beso
ESMERALDA. Yo tb recuerdo el duralex, pero el blanco, ojalá hubiera tenido el de color caramelo… al menos, era de color je je je.
Un abrazo bonita.
SHANTAL. Me alegra haber despertado tus recuerdos.
Un abrazo.
JOSE. Jajajajajajaa. Siempre pensando en darme pal pelo, mira que eres. Mejor invítame a desayunar….pero no en duralex por faaaaaaa
Besos con techo.
SUNSI. Hola bonita, que alegría verte por aquí. Te lo voy a contar por el puro enchufe que te tengo. Se trata de un suicidio colectivo de una familia judía antes de que suban a buscarlos los nazis. Su último mantel, sus últimas tazas y su último momento de humanidad… yo sobreviví, porque como era una niña inocente, me dio mala espina tanta ceremonia y tanta seriedad….
Pero cielo, es solo una historia, nada tiene que ver conmigo, yo no soy judía… aunque quizá un poquito sí, porque en Béjar hay muchos descendientes de judíos, si lo fuera, lo sería a mucha honra.
Besos cosa guapa.
ANTONIO. Qué bonito escribes, podría ser perfectamente la continuación de la historia. Me la quedo, con tu permiso, para alguna ocasión ;)
Un abrazo
ÑOCO. Siempre hay alguien especial alrededor de una mesa.
No me extraña que te encante esa frase, ya que la incluí por sugerencia tuya al ver la foto… a mí tb me encanta esa frase tan visual, igual que se podía ver el halo del calor de la plancha y, por supuesto, el olor del planchado mmmmmm, será por eso que nunca me ha importado planchar. Gracias por tu aportación.
B9B + 2
MALO. Jajajajajajaaja, te colaste mientras contestaba.
Si la tienes, hazle una foto para otro post.
Un besote gordo gordo compañero
MALO.NO HABÍA VISTO EL PRIMER COMENTARIO...AY DIOS QUE LÍO.
Si, en esas pensaba, en esas tazas que solo mirabas de lejos porque si te acercabas un poco ya te estaban gritando, aunque yo las recuerdo azules ¿puede ser?
Gracias por tus palabras loquito.
Y un gran beso
Tu relato me trae olores, sensaciones , recuerdos... de mi infancia y no tan infancia, ya que el duralex y ademas de color caramelo, lo conocí siendo un poco mas crecidita. Seguro que yo me hubiese quedado dormida con el chocolate, ya sabes que soy golosa.
Mis besos
El desayuno esta esperando chocolate con churros en casa del SR. Espartero dueño de la calle que también lleva su nombre.
Saludos
HABIBI. ¿Qué haces levantada a estas horas??? Ya sé que eres una golosa... pero ese chocolate ummmmm, mejor no probarlo je je je.
Besitos corazón.
JOSE. Iré, iré, no sé cuando, pero iré :)
Besos
Alguna vez vi una película, Los otros, me gustó, es de las pocas que me sorprenden al final y estoy en suspenso durante la trama, vamos no son predecibles :)
Será que nosotros somos, Los otros?
Besitos amiguita
VANE. Yo creo que nosotros bien podríamos ser los otros.
Un beso guapa.
Una bella estampa tierna y angelical, como si fuera un recuerdo de mocedad.
Y sin embargo, ha habido un asesinato múltiple.
Todos muertos menos tú.
Hummm, aparentemente eres muy sospechosa...por algo no querías chocolate :P
Pero bueno habrá que ver tu confesión y la de tu madre (que no se ha sentado a tomar chocolate)
Vete pidiendo un abogado.
Por los vasos ni te preocupes que con los duralex ya se sabe...si no se rompen ahora se rompen después.
¿se me ha ido mucho la olla mi querida mujer tremenda?
Te quiero.
Muakkksssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss
sí, tambien azules. <por cierto aún las venden.
MARRUBI. Estás muy lokita tú, ya verás cuando yo comente tus escritos....¡¡te vas a enterar!!! Te amenazo con estar todo el día en tu blog dándote guerra jajajaaja.
Un besazo cosa guapa.
MALO. Tendremos que ir a comprar.
Besitos corazón.
Eres lo másssssssss. Gracias, Marinilla. Un beso, dos y tres.
Marina:
La historia parecía llena de evocación y de ternura; pero, terminó siendo más dura que gallo al horno.
La verdad es que me sorprendiste con ese final.
Un beso y que tengas un buen fin de semana.
Sencillo y precioso relato, y esa pincelada de los misterios de un amadre, muy grande.
Abrazos
Piedra
Recuerdo a mi madre haciendo chocolate como antes. Y nada de churros: rebanadas de pan blanco. La casa olía a fiesta.
Besos.
Querida ¿podrías decirme por qué tan especial es el momento, el día en el cual he aparecido? ¿qué caprichos tiene el destino?
Estoy en ascuas.
Besos
SUNSI.- Es que me gusta tenerte por aquí.
Muakkkkkkkkksssssssssssssss.
ARTURO.- Nada es lo que parece en las historias, mi querido amigo, y en eso tú eres un maestro.
Otro beso para ti y sí, mi finde va bien.
MIGUEL BUENO. El misterio es lo que hace trabajar al lector…espero haberlo conseguido.
Un abrazo.
PEDRO. Ummmmm esas rebanadas de pan tostadas en la sarten…..en mi casa tb las poníamos en pedacitos pequeños en el puré de lentejas.
Besos corazón.
CALPURNIA.- Mis escritos siempre son misteriosos y cada cual puede interpretarlos a su antojo o según sus sentimientos…haz tú lo mismo y deja que ese misterio me siga rodeando….¡Qué sería de la literatura sin un toque de desazón!.
Gracias por volver.
Un besín
Marina, me has recordado mi niñez pero yo si me dormia.
Las tazas de duralex. Sabes que aún tengo algunas de color verde.
Un fuerte abrazo y hasta pronto.
TERESA. Hola guapa ¿Qué sería de nuestra niñez si le quitamos el recuerdo de las tazas del duralex.
Un besito
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