Y se fue con la luz de la tarde
se perdió en el polvo del último sol
allí quedó el silencio cautivo
deshaciendo poco a poco su labor
las horas van perdiendo su frescura
en el jardín las flores permanecen alerta
hoy la tierra remueve sus terrones
respondiendo al aldabón dorado.
la memoria, efímera y casquivana
bailará, sólo, mientras suene la música.